Tiendes a fijarte en los chicos malos, te gusta explorarlos y sacar lo mejor de ellos para eventualmente cambiar su personalidad. No sabes por qué, pero la mayoría de las veces te ves envuelta en relaciones un tanto complicadas y tóxicas.

Sueles valerte de tu belleza para resolver todos tus problemas y usualmente dejas de lado tus sueños por complacer a tu chico. Te falta practicar el amor propio y valorarte mucho más, ¡recuerda que tu felicidad va primero!

Le tienes miedo a la soledad y a nunca encontrar a tu alma gemela. No te gusta estar sola, pues eres una romántica empedernida y siempre has soñado con encontrar al chico perfecto para formar una linda familia en el futuro. A veces sueñas tanto con el amor verdadero, que incluso lo dejas todo por un hombre.

Eres una chica muy dependiente; te gusta que en una relación sentimental sea tu chico quien lleve las riendas, pues te gusta que te rescate de la realidad y que te haga vivir un cuento de hadas. Normalmente sueles buscar aprobación en todo lo que haces, sobre todo la de tu galán.